para voz

Dulces sueños niña mía
y un triste amanecer
días y años se me vienen
para en una noche colapsar
Alegres sentimientos
llenan mi alma 
que hoy en ti descansa
Eres toda la luna
aquella que, con una mirada
siempre me conforta
sin la cual simplemente me perdería
en toda mi oscuridad
Y es que hoy despierto
contigo en mi mente
como parte de un sueño
que espero nunca termine
Gratos besos e ilusiones me das
los cuales nacen hoy
para llenar un espacio
de un silencio despreciable
Estos versos son reales
nacen de mi alma
los cuales solo quieren ser
alimento para voz
Y para eso están, para compasarte
pues son parte de lo que soy
un secuestrador de palabras
un ladrón de sentimientos
que solo pide miradas.